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Para decidir tu talla de camiseta te aconsejamos que uses una de las camisetas que ahora tienes, la extiendas plana y midas como te indicamos en la imagen y así podrás ver que talla es la que mejor te sentará. Recuerda que son prendas 100% algodón preencogido pero pueden tener alguna pequeña variación tras el primer lavado.

Manga corta unisex 100% Algodón peinado pre-encogido "Ringspun" de 190 gr. • Cubre costuras reforzado en el cuello • Cuello con acabado de canalé elastano • Estilo clásico tubular • Colores con tintes naturales Manga corta chica 100% Algodón peinado pre-encongido "Ringspun" de 190 gr. • Cubre costuras reforzado en el cuello • Cuello con acabado de canalé elastano • Estilo clásico entallado con costuras laterales • Colores con tintes naturales

Calidades de nuestros productos

Antes de decidir sacar un nuevo producto lo sometemos a todo tipo de pruebas para que tu puedas disfrutarlo el mayor tiempo posible.

Nos preocupamos desde el tipo de algodón de las camisetas, como está producido, la calidad del mismo, el tipo de tintes utilizados y si son ecológicos, la durabilidad de las prendas, el tipo de cerámica para las tazas, como se produce la porcelana, el reciclado de los productos una vez decidas desprenderte de ellos, por eso queremos decirte que para nosotros es importante ofrecerte el mejor producto que podemos fabricar.

Kraftwerk

24.00

Kraftwerk son unos de los más importantes pioneros de la música electrónica.

Kraft­werk son con­si­de­ra­dos los pio­ne­ros de la músi­ca elec­tró­ni­ca, sus rit­mos repe­ti­ti­vos y la inclu­sión de múl­ti­ples sin­te­ti­za­do­res y voco­ders en sus com­po­si­cio­nes hicie­ron que estas nue­vas for­mas de enten­der la músi­ca entra­sen en las lis­tas de éxitos.

Pero los orí­ge­nes de la músi­ca elec­tró­ni­ca comen­za­ron unos años antes… unos cuan­tos años antes…

Lá música electrónica en el siglo XIX

Si, no esta­mos equi­vo­ca­dos, los soni­dos elec­tró­ni­cos ya comen­za­ron en el siglo XIX, años antes de que ni siquie­ra los inte­gran­tes de Kraft­werk hubie­sen nacido.

En 1898 se cons­tru­yó el que se pue­de con­si­de­rar el pri­mer ins­tru­men­to electrónico.

Real­men­te era un dis­po­si­ti­vo elec­tro­me­cá­ni­co crea­do por Thad­deus Cahill que median­te rue­das tona­les elec­tro­mag­né­ti­cas pro­du­cía soni­dos simi­la­res a los del órgano.

Este ins­tru­men­to pesa­ba unas 200 tone­la­das y media 18 metros de largo.

El nom­bre de este gigan­tes­co ins­tru­men­to era Telhar­mo­nium o Dyna­mopho­ne.

El Therlarmonium

Los inicios del siglo XX

En 1919 se creo el que se con­si­de­ra el pri­mer ins­tru­men­to elec­tró­ni­co de mane­ra oficial.

Su crea­dor se lla­ma­ba Leon The­re­min y su ins­tru­men­to lle­va­ba su nombre.

El The­re­min se uti­li­zó en múl­ti­ples con­cier­tos y reci­ta­les a lo lar­go de todo el mun­do sien­do un ins­tru­men­to que ha lle­ga­do a nues­tros días uti­li­zán­do­se en muchos temas actuales.

La cons­truc­ción del The­re­min esta­ba for­ma­da por dos ante­nas metá­li­cas que detec­tan la posi­ción de las manos del inter­pre­te que hace sonar el ins­tru­men­to sin tocarlo.

Al mover las manos ale­ján­do­se o acer­cán­do­se de las ante­nas se actúa sobre un osci­la­dor y un modi­fi­ca­dor de volu­men que son los que hacen sonar el The­re­min.

Otro ins­tru­men­to que fue más cono­ci­do en su épo­ca pero que no se ha segui­do uti­li­zan­do de for­ma tan cono­ci­da como el The­re­min fue el Mar­te­not, crea­do por Mau­ri­ce Mar­te­not.

El Mar­te­not al con­tra­rio que el The­re­min si requie­re con­tac­to por par­te del inter­pre­te, al menos en par­te ya que está for­ma­do por un tecla­do y un gene­ra­dor de baja frecuencia.

El inter­pre­te se colo­ca un ani­llo en el dedo índi­ce de la mano dere­cha, la posi­ción de la mano sobre el gene­ra­dor de baja fre­cuen­cia varia la altu­ra que ten­drá la nota que será varia­da median­te el tecla­do que usa­rá con la mano izquierda.

Llegan los sintetizadores

Des­pués de varias evo­lu­cio­nes en los méto­dos de gra­ba­ción con con­si­guie­ron mejo­rar los sis­te­mas de repro­duc­ción tales como el sis­te­ma AC Bias o la gra­ba­ción en esté­reo por par­te de AEG en 1942 apa­re­cie­ron los pri­me­ros sin­te­ti­za­do­res electrónicos.

Pre­cur­so­res de estos sin­te­ti­za­do­res fue­ron los Órga­nos Ham­mond que eran dis­po­si­ti­vos elec­tro­mag­né­ti­cos con un soni­do muy característico.

El pri­mer sin­te­ti­za­dor fue el Cla­vi­vox, crea­do por Ray­mond Scott y Robert Moog (si el del sin­te­ti­za­dor Moog).

Clavivox

Des­pués lle­go el Buchla dise­ña­do por el inge­nie­ro de soni­do Don Buchla, si bien el pri­mer mode­lo no tenía un tecla­do como el de un piano si per­mi­tía la gene­ra­ción de bucles soni­dos median­te una pro­gra­ma­ción pri­mi­ti­va median­te conmutadores.

Pero el sin­te­ti­za­dor que revo­lu­cio­nó la músi­ca elec­tró­ni­ca fue sin duda el Moog.

Crea­do por Robert Moog en 1964, el sin­te­ti­za­dor modu­lar Moog fue un cam­bio en los ins­tru­men­tos musi­ca­les electrónicos.

Robert Moog Robert Moog con algu­nos de sus sintetizadores[/caption]

Etapa pre-Kraftwerk

En 1968 Ralf Hüt­ter y Flo­rian Sch­nei­der se cono­cie­ron en Düs­sel­dorf en un semi­na­rio de impro­vi­sa­ción musi­cal y crea­ron un gru­po lla­ma­do Orga­ni­za­tion.

Con Orga­ni­za­tion die­ron varios con­cier­tos en clu­bes, salas de arte y uni­ver­si­da­des mos­tran­do su músi­ca electrónica.

A ellos se unie­ron Basil Ham­mou­di, Bucht Hauf Alfred Mönicks y Kon­rad Plank.

Solo gra­ba­ron un dis­co titu­la­do Tone Float con RCA Vic­tor en 1970.

Este dis­co solo se podía con­se­guir en Ale­ma­nia impor­tán­do­lo des­de Rei­no Uni­do pro lo que las ven­tas fue­ron esca­sas y RCA aban­do­nó al grupo.

Tras este fra­ca­so tan solo Ralf Hüt­ter y Flo­rian Sch­nei­der con­ti­nua­ron con sus pro­yec­tos musi­ca­les pasan­do a crear Kraft­werk.

Organization - Tone Float Cará­tu­la del dis­co Tone Float de Organization[/caption]

Nace Kraftwerk

En 1970 Ralf y Flo­rian se esta­ble­cen en su pro­pio estu­dio de gra­ba­ción lla­ma­do Kling Klang Stu­dio en Düs­sel­dorf y ese mis­mo año gra­ban su pri­mer dis­co lla­ma­do Kraft­werk 1, la por­ta­da de este dis­co solo tenía su nom­bre y un cono de trá­fi­co. Este cono de trá­fi­co paso a ser su mar­ca como gru­po y aún permanece.

Sus pri­me­ros con­cier­tos se limi­ta­ron a Ale­ma­nia pero en 1973 amplia­ron su gira y die­ron con­cier­tos en París, el espec­tácu­lo audio­vi­sual inclui­da luces de neón y pro­yec­cio­nes de diapositivas.

Tras su segun­do dis­co lla­ma­do Kraft­werk 2, en 1973 publi­can su ter­cer álbum titu­la­do Ralf&Florian, este álbum ya con­te­nía soni­dos crea­dos con sin­te­ti­za­do­res y voco­der y un libre­to con dibu­jos de Emil Schult y los pro­pios Ralf y Florian.

El siguien­te año publi­ca­ron el álbum que los acer­có al publi­co fue­ra de los cir­cui­tos en los que has­ta ese momen­to tocaban.

El álbum Auto­bahn, este álbum tenía un tema de 22 minu­tos y Hüt­ter y Sch­nei­der toca­ron todos los ins­tru­men­tos y can­ta­ron temas co-escri­tos con Emil Schult que tam­bién dise­ño la cubier­ta del disco.

Con su siguien­te dis­co, Radio-Acti­vity, con­si­guie­ron un dis­co de oro en Fran­cia, pero no obtu­vo éxi­to de Auto­bahn a pesar de ello.

Tras el no tan buen resul­ta­do de Radio-Acti­vityKraft­werk comen­zó a pen­sar en su siguien­te tra­ba­jo, para ello cons­tru­ye­ron un secuen­cia­dor de 16 pis­tas para poder con­tro­lar el Mini Moog.

Este álbum se lla­mó Trans Euro­pe Express.

The Man-Machi­ne fue su siguien­te álbum, para este nue­vo dis­co cam­bia­ron su méto­do de inter­pre­ta­ción y lo que hicie­ron fue hacer que los secuen­cia­do­res del estu­dio y res­to de equi­pos repi­tie­sen melo­días mien­tras ellos rea­li­za­ban diver­sas mez­clas, así a base de repe­tir impro­vi­sa­cio­nes con­si­guie­ron crear los temas del disco.

Kraftwerk se vuelve digital

Cuan­do en Espa­ña lo que triun­fa­ba era la Movi­da, Kraft­werk tra­ba­ja­ba en su nue­vo trabajo.

En 1981 lan­zó Com­pu­ter World, el dis­co se com­pu­so, gra­bó y mez­cló en el Kling Klang Stu­dio uti­li­zan­do gra­ba­ción secuen­cial ana­ló­gi­ca mul­ti­ca­nal y sin­cro­ni­zan­do la gra­ba­ción sobre cin­ta en un pro­ce­so crea­do en el pro­pio estudio.

Algu­nas de las voces elec­tró­ni­cas que apa­re­cen en el dis­co están hechas con un tra­duc­tor de Texas Ins­tru­ments.

En esta déca­da Kraft­werk se embar­có en un ambi­cio­so pro­yec­to, hacer por­tá­til el Kling Klang Stu­dio des­de 1976 no habían podi­do hacer con­cier­tos en direc­to dada la com­ple­ji­dad del sis­te­ma de gra­ba­ción y pro­duc­ción del gru­po, así que con­vir­tie­ron todo el estu­dio en modu­lar median­te un sis­te­ma de racks y vol­vie­ron a la carre­te­ra con una gira mun­dial por Euro­pa, Esta­dos Uni­dos, Japón, Aus­tra­lia y la India.

En este nue­vo Kling Klang por­tá­til la estruc­tu­ra for­ma­ba una «V» tras los com­po­nen­tes del gru­po y cua­tro pan­ta­llas mos­tra­ban videos y animaciones.

Mien­tras en Espa­ña lle­ga­ba Naran­ji­to, los Kraft­werk comen­za­ron la pro­duc­ción de su siguien­te dis­co lla­ma­do Tour de Fran­ce.

El álbum tenía como con­cep­to cen­tral el ciclis­mo tan­to en los aspec­tos físi­cos como men­ta­les en cuan­to a hom­bres y máqui­nas, en este dis­co comen­zó la expe­ri­men­ta­ción con sam­plers digi­ta­les uti­li­zan­do rui­dos de ciclis­tas, res­pi­ra­cio­nes huma­nas y otros soni­dos para crear ritmos.

El tema prin­ci­pal fue uti­li­za­do para el Tour de Fran­ce del año 1983, el álbum Tour de Fran­ce no pudo ser ter­mi­na­do has­ta el año 2003.

Para­le­la­men­te al desa­rro­llo de Tour de Fran­ce esta­ban tra­ba­jan­do en Tech­no­pop, tra­ba­jo que se publi­có en 1986 final­men­te con el títu­lo de Elec­tric Café.

Este álbum fue un cam­bio en la tec­no­lo­gía uti­li­za­da por el gru­po ya que todo el Kling Klang Stu­dio se vol­vió digital.

Tam­bién fue el pri­mer dis­co en el que en el tema Musi­que Non-Stop fue rea­li­za­do de for­ma ínte­gra­men­te sin­té­ti­ca con imá­ge­nes por orde­na­dor crea­das por Rebe­ca Allen.

Des­de enton­ces Kraft­werk ha segui­do evo­lu­cio­nan­do en su músi­ca y sus crea­cio­nes has­ta nues­tros días pero sin per­der la esen­cia de la músi­ca elec­tró­ni­ca de sus orígenes.

Kraftwerk

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